Internet y las redes sociales tienen el poder de informar y engañar, y hacer ambas cosas a velocidades que nunca hemos experimentado. Este hecho ha sido, una vez más, mostrado como la epidemia de COVID-19 ha dominado las plataformas de medios sociales durante semanas.
Y mientras la verificación de la exactitud de la información sigue siendo una preocupación, un investigador occidental está haciendo hincapié en cómo los medios sociales también están en una posición única para ayudarnos a hacer frente a un tema tan masivo y complejo.
“Los medios sociales pueden ser muy útiles”, dijo la profesora de Estudios de Información y Medios de Comunicación, Anabel Quan-Haase. “Por supuesto, no toda la información que existe es igualmente útil, pero tener las conexiones y la comunidad adecuadas puede ayudar a la gente a darle sentido a una información muy compleja que a menudo está cambiando rápidamente.
“Se está transmitiendo mucha información sobre la pandemia en períodos de tiempo muy cortos. Es fundamental que otras personas nos ayuden a dar sentido a esta información. Las redes sociales propagan la desinformación, pero también son buenos para identificar y señalar la información inexacta.”
Quan-Haase, que estudia el impacto de los medios sociales en la sociedad, señala las redes de personas que trabajan para dar sentido a los contenidos compartidos mediante comentarios de crowdsourcing, críticas a ciertos tipos de información, enlaces a otras fuentes relevantes e identificando dónde se necesita más conocimiento. También reúnen una amplia colección de fuentes y la hacen más fácilmente accesible.
“Los redes sociales ayudan a mover una amplia gama de información de un conjunto diverso de fuentes. Por ejemplo, mi WhatsApp, donde obtengo videos de expertos, actualizaciones de la Organización Mundial de la Salud y del Instituto Koch de Alemania, enlaces a videos divertidos, etc. Nunca sería capaz de reunir fuentes tan variadas y relevantes por mí mismo. Básicamente, los medios sociales están haciendo todo ese trabajo por mí”, dijo. Existen además, muchos dispositivos como cámaras y altavoces que permiten acercarnos más a la persona, a pesar de la distancia.
Las redes sociales también pueden ayudar a las personas a sentirse menos solas. Todos los niveles del gobierno han alentado a los canadienses a mantenerse conectados con sus seres queridos utilizando herramientas digitales. Aunque se nos pida que nos mantengamos físicamente separados, nadie se cuestiona las consecuencias psicológicas negativas que pueden experimentar los individuos aislados.